Brindo por la igualdad.

Todos somos uno. El ser humano es una simple y básica mezcla de mujeres y hombres que se reducen en un mismo ser.

Agradezcamos a personas como Olympe de Gouges, redactora de una adaptación de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, quien cambia en muchos casos la palabra hombre por mujer.

v  La mujer nace libre y permanece igual al hombre en derechos. Las distinciones sociales sólo pueden estar fundadas en la utilidad común.

v  El objetivo de toda asociación política es la conservación de los derechos naturales e imprescriptibles de la Mujer y del Hombre; estos derechos son la libertad, la propiedad, la seguridad y, sobre todo, la resistencia a la opresión.

v  Principio soberanía: ningún cuerpo, ningún individuo, puede ejercer autoridad que no emane de ellos.

v  La ley debe ser la expresión de la voluntad general; todas las Ciudadanas y Ciudadanos deben participar en su formación personalmente o por medio de sus representantes. Debe ser la misma para todos; todas las ciudadanas y todos los ciudadanos, por ser iguales a sus ojos, deben ser igualmente admisibles a todas las dignidades, puestos y empleos públicos, según sus capacidades y sin más distinción que la de sus virtudes y sus talentos.

v  Ninguna mujer se halla eximida de ser acusada, detenida y encarcelada en los casos determinados por la Ley. Las mujeres obedecen como los hombres a esta Ley rigurosa.

v  Nadie debe ser molestado por sus opiniones incluso fundamentales; si la mujer tiene el derecho de subir al cadalso, debe tener también igualmente el de subir a la Tribuna.

v  Para el mantenimiento de la fuerza pública y para los gastos de administración, las contribuciones de la mujer y del hombre son las mismas; ella participa en todas las prestaciones personales, en todas las tareas penosas, por lo tanto, debe participar en la distribución de los puestos, empleos, cargos, dignidades y otras actividades.

Éstos son algunos de los muchos apartados por los que está formada dicha Declaración.

A ésta escritora, dramaturga, panfletista y política francesa le sumaría nombres como el de Boudica, Simone de Beauvoir, Catalina la Grande, Mary Wollstonecraft, Jane Austen, Susan B. Anthony, Marie Curie, Frida Kahlo... Quienes son solo algunas de las tantísimas mujeres que han aportado y ayudado a la participación de la mujer en la sociedad cuando el mundo entero les iba en contra.

Gracias a ellas y a las que hoy día siguen luchando por dar un paso más y hacer entender que no somos un segundo sexo o el sexo inferior sino que somos seres humanos en igualdad de condiciones.

Feliz Día Internacional de la Mujer.